La memoria nos suele jugar malas pasadas. Y tengo una deuda pendiente con, al menos, tres personas de la Tertulia Perdiguer. Ellos votaron sus 10 películas favoritas, pero no ha aparecido una semblanza de estos tres cronopios cinéfilos.Luis Ezpeleta
El hijo pródigo que se fue y, me temo, no volverá a pesar de los esfuerzos de nuestro ínclito Secretario, el bondadoso Pepe Laporta. Estuvo largo tiempo en la Tertulia y, en teoría, nunca se dio de baja. Pero ya hace como tres años que se ausentó. Buen zagal treintañero, absoluto devoto del cine americano y amante de las procesiones. Regresa hombre. Te queremos.
Santiago García Calvo
Este sí que está y acude a las reuniones del último sábado mensual. Acaso es el hombre más entrañable por su fidelidad al cine y su avanzada edad. Antiguo ferroviario es, naturalmente, amante de las películas con trenes, y con criterio porque anduvo años una tras película tan injustamente olvidada como notable: Un hombre la vía de Andrzej Munk (1957, aquel gran cineasta polaco prematuramente desaparecido. Otro lujo.
Rafael Castillejo
Que yo sepa nunca ha sido miembro de la Tertulia Perdiguer, pero como si lo fuera. Todo el mundo lo conoce y es famoso en Zaragoza entera. Animador cultural y festivo de primera, buen cantante y excelente persona. Su página web -que lleva su nombre- es un insólito Palacio de las Maravillas. Además él fue quien que publicaba -y espero lo siga haciendo- textos míos antes de la creación de este blog. Asi que muchísimas gracias y por muchos años.
Os abrazo a los tres.
Haces bien en incluir a Rafael Castillejo. No sé si has entrado últimamente en su célebre página de recuerdos -su desván-, ya que allí, en la galería de personajes ha colgado una foto obtenida en la tertulia, nada menos que en la bodega. Es del año 1997, y aunque no son todos los que están y faltan otros que luego serían, tiene su aquel. Tristemente aparecen dos amigos ya desparecidos, Celio y Alberto.
ResponderEliminarUna reliquia. No estás tú, pero la foto sigue teniendo su valor.
Gracias, Luis y Fernando. La verdad es que comencé a ir a la Tertulia hace muchos años. Pronto me di cuenta que pertenecer o asistir a ella no debía obligar a tener que opinar sobre las películas vistas durante el mes, sobre todo, por el gran conocimiento del CINE de varios de sus miembros. Las dos últimas veces, dejé pasar mi turno porque me apetecía más escuchar las opiniones de los que realmente podían aportar algo. Al poco tiempo, mis problemas de espalda -que muchos conocéis- se agravaron. La última vez que acudí, la tertulia duró casi cuatro horas y salí con lumbalgia. Así que dejé de ir, y la verdad es que lo siento porque allí se pueden aprender muchas cosas. En cuanto a la foto que dice Fernando que he puesto en mi Web, creo que tú, Luis, también la insertaste hace poco. Yo, la he incluido en blanco y negro, que es el color que reina en mi "viejo desván".
ResponderEliminarUn abrazo y que el Espíritu de la Navidad os acompañe estos días como cuando erais niños, aunque ya nada sea lo mismo.