Dedicado a toda la dinastía Lacambra: Don Emilio (el fundador), Guillermo, Pascual....y Jose Mari
Imposible recordar la primera vez que fui a comer a Casa Emilio. Debió de ser allá por mis 18 o 19 años y, desde luego, el motivo no fue otro que la extrema ligereza de sus precios.Tras el estreno han sido innumerables ocasiones en las que hecho colación en tan barato refectorio. Confieso que al principio ignoraba su dimensión política, pero no tarde mucho en conocerla. Casa Emilio era, es y será (aunque los tiempos hayan dejado de ser propicios al rojerío) el hogar gastronómico de la izquierda aragonesa. De Zaragoza, sobre todo, pero no únicamente de la capital de Aragón lo que será fácil deducir en la lista de personas y personalidades que han frecuentado el refectorio y los pintores que han dejado óleos o dibujos allí.. Al menos dos nocheviejas las celebré en Casa Emilio con un ritual insólito: las doce campanadas las ejecutaba el indispensable Jose Marí sirviéndose para ello de dos tapas enormes de cacerolas, feliz año y, todos, absolutamente todos los clientes-amigos nos abrazábamos y , de pie, cantábamos la Internacional ¡¡¡en francés!!! y puño en alto. Franco estaba decrépito pero no cadaver. Casa Emilio se inauguró el 7 de octubre de 1939.
Casa Emilio se ubica en la Avenida de Madrid nº 5 y es el restaurante más antiguo de Zaragoza despues de Casa Lac, el que está al final del Tubo y posee el comedor más bello de la ciudad. El el de Casa Emilio era en la década 67-77 de tasca o de "casa de comidas". No había bar y los camareros lucían una indumentaria singular consistente en una amplio y largo mandilón gris marengo. Emilio Lacambra Manzano - el propietario - es una de las más veteranas instituciones del Partido Comunista, al que nunca ha traicionado ni ha devenido tránsfuga. El tiempo nos ha convertido en amigos y confidentes de inofensivos alcahueteríos, políticos naturalmente. A la par que se fueron abriendo hasta cuatro comedores nuevos, el más íntimo de los cuales lleva el nombre de Labordeta. Emilio, que fue durante varios años presidente de Horeca, continua teniendo su domicilio particular en el barrio obrero de Torrero. La historia del restaurante viene documentada excelentemente en el libro que se editó en 2010: Casa Emilio 70 años y que me fue regalado por el chef y propietario -hoy ya jubilado pero frecuentemente al pie del cañón - quién me invitó a la presentación del mismo. No acudí al acto porque no quería encontrame con altos cargos de la D.G.A, por si acaso. Al parecer no estuvieron, lo que me dejó en una posición algo grosera.
El que Emilio sea del P.C.E. no lleva aparejado que la izquierda que allí llenaba/llena estómagos se limitase a ese partido. No, el espectro era/es más amplio y llega al P.S.O.E., que hace muchos años que nada tiene que ver con el socialismo, o al nacionalismo, antes del P.S.A. ahora de la CHA (Chunta Aragonesista) que como es sabido es lo más opuesto al internacionalismo marxista. Nada que reprochar a Emilio; tiene tantos amigos que dificilmente puede oponerse al hecho de que su adscripción política, como la mía, esté en las antípodas de algunos comensales. Además, en Casa Emilio nunca ha estado reservado el derecho de admisión y es el único restaurante de Zaragoza en el que he visto servir comida gratis a gentes que al sentarse a la mesa avisaban que no tenían dinero para pagar la factura. No hay que olvidar que esta acogedora fonda comenzó, merced a su localización, como figón de camioneros allá por 1920 cuando Luis Buñuel les llevaba pan gratuito. En otro comedor sito asimismo en la planta baja hay un divertido cuadro de Mayayo en el que contemplamos a Emilio, con gorro y delantal de cocinero, presentando una tentadora langosta a Marx, Lenin, Mao, Fidel, Trostky...... Para despejar dudas.
La cocina de Casa Emilio es con acentos marcadamente aragoneses. Yo lo que más disfruto son menuceles como callos, sesos o madejas. Alimentos poco dietéticos y que jamás aceptaran burgueses hipocondríacos y jovenzuelos amantes de hamburguesas y todo aquello que les suene a comida americana (USA). Son excelentes los revueltos y más que dignos el ternasco asado y el jarrete guisado. Los menús del día ofrecen múltiples alternativas a variados precios, siempre económicos en relación con la cantidad y calidad que ofrecen. Otra alternativa es solicitar algunos platos de encargo como una muy estimable paella de marisco que no escatima ni almejas, cigalas o langostinos. En la década prodigiosa se podían degustar unas maravillosas angulas al precio más económico de Zaragoza. En los postres, el surtido de quesos o el melocotón en vino antes que el "flan de huevo de gallina" como siempre recita Jose Mari. Se les suele ir la mano en el aderezo de aceite y vinagre. Carta de vinos exclusivamente de la tierrica.
El yantar fue/es lo de menos en Casa Emilio. Aqui lo que importa es la tertulia, la charla, la comunicación y cuasifraternidad entre viejos y nuevos amigos, enraizados o no en la militancia o simpatía política. A partir, por ejemplo, de 2005 de vez en cuando nos juntamos en el comedor Labordeta varios miembos de ambos sexos de la Tertulia Cinematográfica Perdiguer, entre los que hay de todo hasta de derechas aunque ningún fascista, que conste. Y nos líamos a parlotear de películas ante la mirada algo asombrada de Jose Mari que nos debe tomar por una panda de locos, en lo que no va muy descaminado. En los años a los que se refiere esta "memorieta", hubo reuniones de la Platajunta y de la Mesa de Partidos. Desopilante aquella en la que estábamos seguro David Jiménez (PSP), Fidel Ibáñez (PCE), Merche Gallizo (MCA), el que suscribe y alguno más que no me acuerdo. Todos pedimos angulas para cenar, ante la estupefacción de un zagal del PT que exclamó ¡¡pero bueno que me a mi solo me han dado en el Partido 50 pesetas!!. Elan pobles los chinos. Ahora no. Estados Unidos les debe una millonada.
Yo, mientras el cuerpo aguante, iré aunque solo sea una vez al mes a Casa Emilio. Mi fidelidad es a mis 64 años tan inquebrantable como hace 30. Al fin y al cabo es como si estuviera en mi casa.
Luis Betrán
Relación brevísima de damas y caballeros no específicamente aragoneses que han circulado por las mesas de Casa Emilio y de artistas que han regalado cuadros y dibujos al propietario o han engalanado el libro de los últimos 70 años de historia.
Gabino Diego (actor)
José Antonio Labordeta (cantautor) y familia
David Trueba (periodista y cineasta)
Ariadna Gil (actriz)
Enrique Vila-Matas (escritor)
Javier Cercas (escritor)
Eloy Fernández Clemente (Andalán)
Javier Tomeo (escritor)
Miguel Pardeza (ex-futbolista del Real zaragoza y del Real Madrid)
Mnuel Vázquez Montalbán (escritor)
Alberto Sánchez (gran animador cultural de Zaragoza y gourmet reconocido)
Tuñón de Lara (historiador)
José Luis Gonzáles Uriol (músico: organista y clavecinista)
Santiago Carrillo (ex-secretario general del P.C.E.)
José Vidal Beneyto (escritor y periodista)
Javier Krahe (cantautor)
Paco Ibáñez (cantautor)
Joaquin Sabina (cantautor)
Pablo Milanés (cantautor cubano)
Guillermina Motta (cantante)
José Sacristán (actor)
Carlos Castilla del Pino (psiquiatra y escritor)
Maribel Verdú (actriz)
Luz Casal (cantante)
Silvio Rodriguez (cantautor cubano)
Carlos Mejía Godoy (cantautor nicaragüense)
Camilo Jozé Cela (escritor)
Els Joglars (Grupo Teatral dirigido por Albert Boadella)
Luis García Berlanga (cineasta)
Alfredo Landa (actor)
Joaquín Ruiz Jiménez (político democristiano)
Ailluta Guevara (hija de Ernesto Che Guevara)
Francisco Rabal (actor)
Fernando Trueba (cineasta)
Juan Luis Buñuel (cineasta, hijo de Luis Buñuel).........
Cuadros y dibujos de........
Juan Genovés
Pablo Serrano
José Orús
Eduardo Salavera
Juan Vera
El Tricicle
Rafael Alberti
Gran Wyoming
Julia Dorado
Moncho Borrajo
Maribel Loren
Daniel Sahun
Marcel Marceau
Cristina Alonso
Jesus Sus
José Falcón...........
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